Parece que nada está más allá de nuestro alcance cuando se llega a conquistar el mundo físico, pero no sabemos qué hacer para tratar las cuestiones morales.
Cómo la pequeña Manya Sklodowski (Marie Curie) se convirtió en la primera mujer en ganar el Premio Nobel de Física, y la primera persona en ganar un segundo premio, es una historia fascinante.