Puede parecer que la Biblia tiene poco que decir sobre la salud mental, pero se pueden establecer muchas conexiones entre la sabiduría bíblica y la investigación moderna sobre salud mental.
Uno de los aspectos más trágicos de la naturaleza humana es nuestra tendencia a idear «armas de protección» que al final se convierten en semillas de nuestra propia destrucción. La capacidad de mentir es una de esas armas.